miércoles, 24 de abril de 2024

La telemedicina en las residencias de mayores, ¿cómo funciona y qué ventajas ofrece?

El equipo de Telemedicina y Coordinación Sanitaria de Clece da soporte a todas las residencias gestionadas por la compañía en España y Portugal. Los médicos de los centros cuentan con una segunda opinión para determinados diagnósticos y tratamientos.




El concepto de telemedicina comenzó con el desarrollo del telégrafo, pero su uso no se propagó hasta la llegada de la digitalización a nuestras vidas. Gracias a las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), la telemedicina se ha convertido en un complemento a las consultas presenciales y, en la actualidad, podemos definirla como una herramienta con la que prestar servicios médicos a distancia y en tiempo real a través del uso de las TIC.

Aunque pueda verse como una forma de sustituir a los profesionales en el lugar donde se encuentra el paciente, desde Clece nos explican que para ellos la aplicación de la telemedicina es diferente. “En nuestro caso, la telemedicina no sustituye a los médicos sino que la utilizamos para dar soporte al equipo facultativo a la hora de tratar a los usuarios de nuestras residencias. De esta forma, los profesionales también se encuentran más liberados y disponen de más tiempo para atender a los residentes de la mejor manera”, explica la Dra. Belén González Lahera, directora del Departamento de Telemedicina y Coordinación Sanitaria que da soporte a todas las residencias gestionadas por la compañía Clece en España y Portugal.

Esta unidad fue creada en 2021 y, desde entonces, los profesionales de los centros residenciales han pasado de trabajar en solitario a formar parte de un equipo consolidado. “La telemedicina es, para mí, el apoyo más grande que ha dejado la pandemia después de todo lo ocurrido. Son las personas que se encargan de orientarnos para conseguir una segunda opinión cuando es muy difícil tenerla”, comenta el médico de la residencia CleceVitam El Parque (Soria), Marcel David Osorio, quien está en contacto directo con el Departamento de Telemedicina de la compañía para la toma de algunas decisiones sobre la evolución de curas, la valoración de determinadas afecciones o la ayuda en la asistencia a personas con enfermedad crónica.

Así, gracias a las TIC y a la experiencia de los dos médicos y una enfermera que forman parte del departamento de la Dra. González, los profesionales que trabajan en las residencias gestionadas por Clece tienen acceso a una segunda opinión siempre que lo necesiten procurando así uno de los principales objetivos de la compañía en el ámbito del cuidado a los mayores: ofrecer la mayor calidad asistencial a las personas usuarias de sus centros.


Principales herramientas de la telemedicina y sus beneficios
Desde que comenzó a utilizarse la telemedicina en Clece, los profesionales sanitarios de las residencias disponen de equipos informáticos que incorporan los últimos avances tecnológicos. A través de estos sistemas, el Departamento de Telemedicina y Coordinación Sanitaria ayuda a los médicos, desde la distancia, a elaborar determinados diagnósticos y tratamientos para evitar que los residentes tengan que ir al servicio de urgencias de un hospital ante un problema menor.

Entre los equipos tecnológicos que encontramos en las residencias de Clece destaca, por ejemplo, el monitor multiparamétrico diseñado para monitorizar las constantes vitales de los usuarios. La principal ventaja de este sistema es que permite establecer una comunicación bidireccional y transmitir los datos directamente a un programa informático que los incorpora al expediente de cada residente. “El Departamento de I+D+i de Clece logró integrar la información recogida por el monitor multiparamétrico con el programa informático que guarda las historias clínicas. Desde entonces, los datos se vuelcan directamente en los equipos sanitarios”, explica la Dra. González. De esta manera, los médicos no tienen que dedicar tiempo a transcribir manualmente todas las constantes.

También utilizan un equipo de toma de constantes en el que se incluyen un tensiómetro, un termómetro y un saturímetro, todos ellos conectados al monitor multiparamétrico. Una de las funciones de este equipo es registrar la extensión de la saturación de oxígeno, por lo que en vez de tener que introducir la información de forma manual, es la propia máquina la que se encarga de registrarla directamente en la aplicación, según explica el doctor Osorio.

En cuanto a los sistemas informáticos, el equipo de pantallas y cámaras para videollamadas es de los más utilizados. “Este es el dispositivo a través del cual hacemos las videollamadas al final de cada semana para mantener una reunión de seguimiento en la que se evalúan, por ejemplo, las curas, cómo es su evolución, etc. También se valoran los registros, los cambios de medicación que ha habido… Al final, lo que te permite es tener un control de calidad”, explica Silvia Piñeyro Segarra, directora del centro CleceVitam El Parque.

A todas estas tecnologías se suma también el uso de tabletas electrónicas con Resiplus integrado (programa que facilita la realización de distintas tareas de gestión en una residencia). Este equipo está diseñado especialmente para ahorrar tiempo, dado que introduce los datos de exploración del residente en el sistema al instante.

Otra de las funciones de la telemedicina en Clece es dar formación continuada a los equipos sociosanitarios de todas sus residencias. “También formamos al personal nuevo, enseñándoles cómo se trabaja en los centros, y a las personas que no tienen práctica en residencias las asesoramos sobre cómo tiene que ser su día a día hasta que vayan cogiendo esa experiencia”, explica la Dra. González.

En definitiva, el uso de las TIC ha aterrizado en los centros de mayores para dar apoyo en el dictamen de determinados diagnósticos, y agilizar el día a día de los profesionales sanitarios de las residencias para que estos tengan más tiempo para atender a los usuarios, que son su máxima prioridad.




Fuente: El Español

martes, 23 de abril de 2024

IA y salud: indicaciones y efectos secundarios. Unas reflexiones desde el antequirófano

Es el momento de que profesionales, instituciones, responsables y asociaciones se pongan a trabajar para conseguir que la IA sea una herramienta útil para el cuidado de los pacientes y la mejora del estado de salud de la población.


No podemos decir que la inteligencia artificial (IA) sea una novedad en el mundo de la salud ni que el metaverso nos deba pillar desprevenidos a los cirujanos. Tras 30 años de ejercicio profesional no recuerdo un electrocardiograma que no venga informado automáticamente en el momento de su registro o un desfibrilador que no supiera reconocer las fases del ciclo cardíaco para evitar descargas en fases peligrosas. El reconocimiento de patrones y los algoritmos de actuación están presentes desde hace décadas.

No resulta una novedad la utilización de aplicaciones o calculadoras que, mediante la utilización de algoritmos previamente testados y consensuados, nos ayudan en la prescripción de los tratamientos más adecuados a los pacientes o nos alertan sobre posibles efectos secundarios o incompatibilidades. Del mismo modo, no puede sorprender que cirujanos y radiólogos (entre otros) sintamos fascinación por el metaverso y estemos a gusto en ese entorno. ¿Qué es sino una biopsia estereotáxica o una cirugía endoscópica? No es más que la actuación sobre una representación más o menos fiable de la realidad. Algo que hoy en día llamamos Realidad Virtual y que no ha dejado de estar presente desde mis comienzos profesionales; desarrollándose e incluso mejorando las capacidades del humano, pasando a llamarse Realidad Aumentada.

Y es que, en el fondo, gran parte de la actividad científica en el mundo de la salud (y si no que les pregunten a los epidemiólogos) ha consistido en la identificación de patrones comunes en los distintos pacientes para identificar la semiología, fisiopatología y opciones terapéuticas de las enfermedades y trastornos.

Entonces, ¿Qué impacto están teniendo las novedades en IA sobre el cuidado de la salud? ¿Qué podemos esperar del futuro? ¿Y qué riesgos?

El desarrollo exponencial de la capacidad de computación permite una gestión de datos hasta ahora inimaginable, facilitando la evolución a la identificación de patrones en situaciones mucho más complejas como la imagen médica. De esta manera se han podido desarrollar sistemas que permiten identificar alteraciones, con mayor precocidad y precisión que el ojo humano, y construir modelos tridimensionales. Con estos modelos se puede diseñar el efecto de una intervención, imprimir prótesis adaptadas al paciente y su situación, ofrecer al cirujano una mejor representación de una situación clínica (por ejemplo, un tumor y su relación con estructuras adyacentes) u ofrecer una mayor información al cirujano durante una intervención. En este sentido, ya existen experiencias en las que, con los dispositivos adecuados (fundamentalmente gafas de realidad virtual o sistemas de cirugía laparoscópica y robótica) se pueden superponer imágenes de TAC o RM sobre el lecho quirúrgico del paciente, proporcionando al cirujano una información valiosísima a la hora de realizar un procedimiento.

La IA puede obtener información de multitud de fuentes y ofrecer soluciones. Soluciones que no dependerán del cansancio, la hora del día o el hambre que tengamos. Ya que, en este sentido, la IA comparte muchas de las características de la caridad: es paciente y servicial, no tiene envidia ni es presumida u orgullosa, no es grosera ni egoísta, no se irrita ni lleva cuenta del mal recibido.

A diferencia de los antiguos modelos algorítmicos de diagnóstico, la IA es ahora capaz de manejar volúmenes de información que le permite llevar su propio proceso de aprendizaje para ofrecer soluciones más acertadas y eficientes para las situaciones clínicas. Herramientas que no tardarán en estar caminando de la mano de los profesionales como ahora lo están las aplicaciones y calculadoras disponibles en los teléfonos móviles.

Y es de esperar, igualmente, que no tardemos en ver desarrollarse sistemas que eliminen las tareas más tediosas y mecanizadas de las profesiones sanitarias: redacción de informes, control de bajas laborales, redacción de historiales, … ¿Qué especialista no sería feliz con un sistema que con solo indicarle que realice la petición de un TAC le devolviera el volante listo con la información clínica del paciente y las características de la exploración que se precisa, y así solo tener que dar el visto bueno? Parece ciencia ficción, pero está más cerca de lo que parece. Y no quiero pensar en la cara de felicidad del radiólogo que reciba ese volante…

Pero como todo avance tecnológico, tiene su reverso tenebroso. No es la herramienta en sí, sino el uso que se le quiera dar. Y la IA no es ajena a ello.

Aún resuena el escándalo que ha obligado a Google a suspender la generación de imágenes mediante Gemini al producir auténticas aberraciones (como representaciones de personas de color o con rasgos orientales como soldados del III Reich). La introducción de sesgos, en este caso para forzar una pretendida diversidad, ocasiona estas situaciones.

Pero esto no pasa de ser una anécdota que ilustra las posibilidades que tiene quien controle y entrene una IA concreta de introducir sesgos con espurias intenciones. Sesgos que podrían llevar a los profesionales de la salud a tomar decisiones que lejos de beneficiar a los pacientes, atienden otros intereses.

Del mismo modo, la IA generativa será capaz de proporcionar datos falsos que justifiquen resultados de investigación interesados. ¿Quién no recuerda los problemas ocasionados por Wakefield publicando un estudio manipulado en The Lancet entre la asociación de la vacuna MMR y el autismo? Los peligros siguen estando ahí, pero las herramientas son más sofisticadas, sutiles y difíciles de detectar. Ignorar esta realidad es una negligencia que conducirá a un deterioro en la calidad del cuidado de la salud. Es, el momento de que profesionales, instituciones, responsables y asociaciones se pongan a trabajar para conocer y acotar estas amenazas, y conseguir que la IA sea una herramienta útil para el cuidado de los pacientes y la mejora del estado de salud de la población.

No podíamos intuir, a principios de los años 90, cómo la llegada de internet o la introducción de los dispositivos móviles iban a cambiar la forma en la que hoy en día practicamos la medicina y la cirugía. Del mismo modo, la IA ha venido para quedarse y revolucionar el modo en que se ejerce, enseña y evalúa el desempeño profesional de los sanitarios. Es nuestra obligación como profesionales familiarizarnos con ella, participar de su desarrollo y tomar las medidas adecuadas para garantizar el mejor servicio sanitario a nuestros conciudadanos.

El momento resulta fascinante. Una ola que nos arrastrará. Y podemos dejarla pasar protegidos en la bodega de nuestro propio barco, o salir a cubierta, verla discurrir y ayudar a sujetar el timón en la dirección adecuada.



Fuente: El Debate

lunes, 22 de abril de 2024

Juan P. Castillo: “Propuestas en el metaverso han quedado atrapadas por empresas oportunistas”

El consejero delegado de Quantum Babylon, empresa española centrada en crear soluciones sanitarias en entornos virtuales, reflexiona sobre las oportunidades y los retos  de la implantación de la tecnología en el mundo de la salud.


Ponerse las gafas de realidad virtual, salir a pasear por calles digitales, charlar con avatares y entrar a comprar todo tipo de productos pagando con NFTs o criptomonedas. Así es como los gigantes tecnológicos imaginan que será el mundo de mañana. El metaverso es un entorno que aún está lejos de universalizarse, pero en el que colosos como Meta, Google, Apple y Microsoft ya están trabajando intensamente. Su construcción ya está dejando una lluvia de millones: en 2025 moverá hasta 400.000 millones de dólares, según un informe de la consultora BCG.

Los expertos vaticinan que, de dar con los medios tecnológicos adecuados, el metaverso puede ser una revolución en todos los campos. También en el sector de la salud. Pero, ¿de qué forma los laboratorios farmacéuticos prevén irrumpir en él? ¿Los hospitales trabajan para usarlo? ¿En qué situaciones y para hacer qué? Una de las empresas españolas que ya está trabajando en aplicar el metaverso en el sector sanitario es Quantum Babylon, nacida en 2018 y con su talento repartido entre Valencia, Galicia y Málaga. Hablamos sobre las perspectivas del sector ante el metaverso con Juan Pablo Castillo, consejero delegado de la empresa.


Pregunta: ¿En general, en qué punto se encuentra el desarrollo del metaverso?

Respuesta: Es una tecnología que se encuentra más avanzada de lo que se cree. Esto es así por cuestiones lógicas de competencia, ya que las empresas son muy reticentes a mostrar resultados hasta que son muy sólidos. En España, por desgracia, vamos un tanto retrasados con el metaverso: las inversiones efectivas en esta tecnología son muy reducidas. Por eso en Quantum Babylon nos hemos centrado en trabajar con entidades extranjeras. Son las que tienen más recursos, pero también más capacidad para comprender el impacto que esta tecnología tendrá a medio plazo.


P.: Aun así, en España sí que se nota un interés muy fuerte por esta tecnología.

R.: ¡Sí! De hecho, si hablamos en concreto del campo sanitario, el nivel de interés de muchos profesionales e investigadores sanitarios es impresionante. En la última década, hemos conectado con infinidad de proyectos, pero hemos visto como la dependencia de las ayudas públicas, el desconocimiento real de esta tecnología o la incapacidad de coordinarse para conseguir proyectos más ambiciosos que les dieran continuidad a largo plazo, les han llevado al fracaso. También hemos visto nacer, crecer y morir infinidad de proyectos españoles académicos o de investigación que han quedado atrapados por entidades y empresas oportunistas.


P.: ¿A qué se refiere? 

R.: Ha habido empresas ávidas de subirse al lomo de la moda del metaverso y obtener dinero fácil de inversiones y ayudas. No han sabido sacar provecho de la oportunidad de relacionarse con profesionales e investigadores muy motivados y, desafortunadamente, sus proyectos no han tenido continuidad.

 

P.: En el campo sanitario, ¿Cómo debemos entender el metaverso?

R.: Debemos entenderlo como un conjunto de tecnologías que permite a los profesionales sanitarios trabajar en equipo con todo tipo de información a través de internet y de redes digitales usando un montón de tecnologías. Se usa tecnología 3D, dispositivos inmersivos y holográficos, inteligencia artificial... La clave para que el metaverso tenga éxito en el mundo de la salud radica en que pueda ofrecer un espacio común y virtual o tridimensional hiperrealista, y esto es muy importante para el sector, en el que los profesionales puedan compartir y tratar información sanitaria desde historiales y análisis hasta imágenes clínicas.

En el campo de la salud, estos entornos virtuales son bastante diferentes a la idea que nos han dado a entender los medios de comunicación


P.: ¿De qué forma trabaja Quantum Babylon para acercar el metaverso al mundo de la salud? 

R.: Nuestro proyecto se centra en el desarrollo de tecnologías inmersivas, de áreas de comunicación ultra segura y de entornos de trabajo o de investigación dentro del metaverso. Personalmente, preferimos referirnos a él con el nombre de “entornos virtuales”, ya que este mundo se fusiona con el espacio físico. Es lo que pasa, por ejemplo, cuando se usan gafas de realidad aumentada o extendida para intervenciones quirúrgicas. En el campo de la salud, estos entornos virtuales son bastante diferentes a la idea que nos han dado a entender los medios de comunicación. El boom del año pasado causado por la empresa Meta, junto con mucha publicidad engañosa vinculada a las criptomonedas, ha empañado la realidad profesional de cómo se desarrolla realmente esta tecnología.


P.: Ha hablado de quirófanos. ¿Las gafas de realidad aumentada van a compartir cajón con el bisturí?

R.: Ya se están usando. De hecho, un ejemplo que muestra cómo esta tecnología se está desarrollando a toda velocidad lo tenemos cerca, en el Hospital de Cromwell de Reino Unido. Allí, los cirujanos Fady Sedra y Sayed Afrab han utilizado gafas Apple Vision Pro para llevar a cabo una intervención quirúrgica. El uso de gafas les permitió tener un mejor control del estado del paciente. Les mostraba su información vital de manera virtual y les ayudaba en la selección de las herramientas que tenían que usar. Todo ello, alojado en un sistema de red accesible a estos dispositivos. Estas gafas también se han utilizado ya en cirugía robótica con la aplicación Mako SmartRobotics y permiten guiar a robots y cirujanos mediante inteligencia artificial. Incluso pueden detectar lesiones difíciles de ver durante una intervención.


P.: Así, el punto clave del sector es adaptarse a los nuevos dispositivos.

R.: Sí. Por ejemplo, hasta hace muy poco, el referente en este campo eran las gafas Hololens, pero tras el anuncio de su discontinuidad en la producción por parte de Microsoft muchos investigadores y equipos sanitarios de desarrollo han visto amenazado su trabajo precisamente porque en España existe poca cooperación de fondo en estas tecnologías inmersivas, como lo que nosotros hacemos, que permita a estos proyectos adaptarse rápidamente a nuevos dispositivos y procedimientos.


P.: ¿Qué beneficios puede traer el metaverso para investigadores y farmacéuticas?

R.: Los beneficios son tremendos. Tanto, que es casi imposible de predecir todas las posibilidades que llegará a tener. Podemos desde reducir los costes y tiempos en investigación y aumentar la probabilidad de éxito a la hora de tratar a los pacientes hasta reducir los costes de la asistencia sanitaria, aumentando su calidad. Se pueden crear consultas interdisciplinaeres y grupos de investigación virtuales asistidos por modelos de inteligencia artificial (IA); hacer intervenciones quirúrgicas asistidas por gafas u otros dispositivos de realidad aumentada; implementar una asistencia virtual avanzada al paciente sin que tenga que ir a la consulta; crear simuladores para mejorar la formación de los profesionales...

"Hay que dejar de competir a pequeña escala y crear grandes unidades de cooperación internacional"


P.: La tecnología presenta beneficios pero también retos. ¿Cuáles son los más relevantes?

R.: Los retos son muchos, pero más allá de los tecnológicos que obviamente se deducen de todo lo dicho son dos. El principal, al menos en lo que España y la Unión Europea se refiere, está relacionado en vencer el gran desconocimiento que hay sobre cómo abordar el profundo impacto que el metaverso o los entornos virtuales en conjunción con la Inteligencia Artificial van a suponer para la medicina en un medio plazo. Hay que dejar de competir a pequeña escala y crear grandes unidades de cooperación internacional.


P.: ¿El segundo tiene que ver con la privacidad de los datos?

R.: Correcto. El segundo reto y no menos importante es la cuestión legal. En la IA y los entornos virtuales de trabajo asociados, es decir, en el internet del futuro, la protección de la información y la privacidad son un punto esencial y muy delicado. Debemos crear una legislación justa y que proteja al ciudadano, pero que, a la vez, no dificulte el desarrollo de la tecnología autóctona frente al imparable avance de Estados Unidos, China y otras naciones emergentes. De no ser así, corremos el riesgo de caer en una peligrosa dependencia.



Fuente: Planta Doce

viernes, 19 de abril de 2024

La ciudad ya utiliza el servicio de Telesalud

El “call center” y los consultorios virtuales comparten edificio con el Servicio Odontológico Municipal de Urgencias 24h, en avenida Colón 4726. Bajo el concepto de búsqueda activa, ya lleva contactadas más de 2.300 mujeres que pasaron por el sistema público para proponerles profundizar estudios y chequeos. Es el primero en su tipo en toda la provincia y funciona bajo la órbita de la Secretaría de Salud Comunitaria, que dirige Liliana Montero.



El servicio de Telesalud es el primero en su tipo en la provincia de Córdoba que implementa atención médica a través de herramientas digitales, desde un espacio preparado para tal fin y con un sistema informático específico diseñado para ello.

Telesalud funciona bajo la órbita de la Secretaría de Prevención y Atención en Salud Comunitaria, que dirige Liliana Montero, y desde su apertura, a fines de julio, ya ha tomado contacto personalizado con 2.322 mujeres para programar consultas médicas online.

El servicio de Telesalud articula la participación de profesionales de las direcciones de Especialidades Médicas (DEM), de Epidemiología y de Atención Primaria de la Salud (DAPS), con apoyo técnico de la Secretaría General que desarrolló el sistema informático y la colaboración de la empresa cordobesa Evoltis.

El intendente Martín Llaryora visitó este espacio y destacó el avance para el cuidado de la salud de los vecinos que implica esta iniciativa, enmarcada en el proceso de reconversión tecnológica del municipio que encaró durante su gestión.

“Esta unidad de Telesalud es parte de la innovación que estamos haciendo en materia sanitaria en la Municipalidad, usando la tecnología para cuidar la salud de nuestros vecinos, especialmente de nuestras mujeres. Puntualmente estamos fortaleciendo los alcances del circuito vital de controles femenino Ronda Fem, ofreciendo chequeos”, destacó Llaryora.

En esta primera etapa, además de la recaptación de mujeres que pasaron por el circuito Ronda Fem, realiza también seguimiento de diagnósticos de notificación obligatoria, tales como Chagas, HIV o sífilis, y de enfermedades crónicas no transmisibles (ECNT) como diabetes, obesidad o hipertensión.

El nuevo dispositivo tiene capacidad para cuatro consultorios virtuales y cuenta con un “call center» de 20 puestos, todos equipados con tecnología de última generación.

Está ubicado en avenida Colón 4726 y comparte una planta del edificio vidriado y con vistas panorámicas del flamante Servicio Odontológico Municipal (SOM) para Urgencias 24 horas, inaugurado a principios de mayo.

“Con este programa, el Estado municipal sale a captar mujeres que ya pasaron por el sistema municipal de salud y que por alguna razón deben volver y no lo han hecho. Se hace un primer contacto telefónico, se les explica en qué consiste la Telesalud, se les informa del resguardo de datos y la confidencialidad del sistema, se agenda un turno y, posteriormente, se hace la teleconsulta con nuestras médicas”, agregó Liliana Montero.


● RONDA FEM

Usuarias del circuito vital que se realiza en la Dirección de Especialidades Médicas con hallazgos de relacionados a enfermedades crónicas no transmisibles y se les ofrece la posibilidad de realizar teleconsulta. Se hicieron 2024 llamadas, con las que se contactaron efectivamente 866 mujeres. La prioridad de atención se ajustó a mujeres sin cobertura de salud y sin antecedentes de control en los últimos seis meses. Al 31 de octubre, 114 ya fueron efectivamente atendidas. Como resultado de las teleconsultas, se derivaron 39 pacientes al segundo nivel, 51 al primer nivel, 5 al tercer nivel de atención.


● GESTANTES CON DIAGNÓSTICO DE SÍFILIS

Las llamadas salientes fueron 4488, y se contactaron a 694 pacientes. El objetivo sanitario de abordar esta línea de cuidado es revincular a las gestantes con el sistema de salud para contribuir a que realice el tratamiento adecuado.


● PREVENCIÓN DE EMBARAZO ADOLESCENTE

Se desarrolla un espacio de gestión de consejería breve fomentando acciones de promoción de la salud y prevención de la enfermedad a poblaciones previamente definidas. A fines de septiembre, durante la Semana de prevención de embarazo adolescente, se hicieron llamadas a las menores de 19 años que habían finalizado su embarazo (167 personas que constituyen la base normalizada) proveniente de la base de Gestantes de la ciudad de Córdoba y se les dio turno para ser atendidas por telemedicina. Se observó en todos los casos la necesidad de acercar información sobre métodos anticonceptivos y elegirlos según sus preferencias, necesidades y situación de salud.


MUJERES SANAS

El objetivo de esta línea de trabajo apunta a favorecer acciones como la promoción de la lactancia, el control de la salud madre/hijo, educación saludable, salud sexual y reproductiva, planificación de actividades de cuidado, detección temprana de problemáticas de salud integral facilitando el acceso a la atención primaria de la salud.

Sobre la base de datos de Municipios Saludables, de mujeres mayores de 19 años, se realizan 797 llamadas, abordando efectivamente a 480 mujeres. Para otorgar turnos por telemedicina se priorizó a 75 personas durante este primer mes que no tenían obra social.


• PERSONAS EN EDAD FERTIL CON DIAGNÓSTICO DE CHAGAS

Se llevaron a cabo 112 llamados (datos acumulados desde 2021 hasta la actualidad) y se abordaron 95 personas, ofreciendo un circuito de atención en las DEM centro para adherir según lo permitan sus condiciones clínicas al tratamiento para Enfermedad de Chagas, con el objetivo de evitar la transmisión vertical en futuras gestaciones.